Hombres de acero y terciopelo

Un libro de Juan Calderón

Libro sobre historias reales de afecto y valor entre hombres en el ejército de Colombia-Sinaí Egipto

"Publico fragmentos, ideas y sucesos que me inspiraron a relatar las experiencias que viví como soldado Colombiano durante el año de servicio militar obligatorio en la península del Sinai como miembro de la Fuerza Multinacional y Observadores. Nacido en una sociedad machista llena de contradicciones pude vivir experiencias de afecto, lealtad y compañerismo que se resisten a ser catalogadas dentro de etiquetas sociales, donde los límites de las orientación sexual se tornaban difusos en un medio que favorecía la intimidad entre hombres." El autor

Título: Hombres de acero y terciopelo

Categoría: Gay / Lésbico / Bisexual

Páginas: 248

Tipo: no ficción

Publicaciones: Lulu

Lo he encontrado hoy en Internet por casualidad y me ha enganchado el previo que he leído, parece bastante interesante. Creo que antes de irme de vacaciones lo compraré para disfrutar de la playa y una buena lectura.

Os dejo algunos extractos del libro para ir abriendo boca:

"LA REALIDAD"

"...Durante el tiempo que había pasado en el ejército la imagen que tenia de mis compañeros había cambiado dramáticamente: el haber tratado de enmarcarme a mi mismo al interior de las etiquetas de orientación sexual me había cegado de la realidad que ahora vivía;

 

quizás la heteronormatividad es solo algún ideal al igual que tantos otros que funcionan como referentes del deber mas no del hacer, pues la realidad me mostraba a mis compañeros como seres sin mayores restricciones respecto al género al momento de la búsqueda de su satisfacción sexual..."

"EXAMEN MÉDICO DE INGRESO"

"Nunca había estado desnudo en público, a excepción de las veces en que me duchaba con mis compañeros de la escuela luego de la clase de educación física o tras la práctica de algún deporte, pero nunca como ahora: observado deliberadamente en mi desnudez...

 

Me sentía expuesto, como si todo lo que yo fuera se reflejara en mi cuerpo, como si este fuera mi alma, como si ese secreto que había  llevado conmigo desde mi infancia pudiera ser descubierto...

Podía sentir el calor de esos otros cuerpos desnudos que me acompañaban en esa angustiante situación, a los que trataba infructuosamente de ignorar pues los sabía objeto de mi deseo: me sentía irremediablemente atraído por mi propio género, ese era mi secreto..."

"TENSIÓN SEXUAL"

"...La presión hormonal que experimentábamos nos creaba necesidades que urgían por su satisfacción. Durante el largo tiempo de convivencia juntos, como al estar de patrulla nos hacíamos conscientes de las necesidades fisiológicas de nuestros compañeros pues todos éramos en muchos sentidos un solo cuerpo.

Era la necesidad de entrar en contacto físico con otro, justificada por actos supuestamente no sexuales. Quizás lo importante no es el acto en sí, sino lo que se piensa sobre lo que se hace...

 

En ocasiones, como sucedía con mis compañeros de la costa Colombiana quienes hacían competencias sobre quien podía eyacular más lejos, era sexo sin hablarse o pensarse como sexo. Para nosotros era “Normal” y en las ocasiones en que los compañeros se apartaban temporalmente del grupo, había un silencio respetuoso entre nosotros. Era un acto de lealtad. Las insinuaciones sexuales encubiertas de juegos eran constantes y frecuentes, como la “Requisa de Billeteras” que alguien anunciaba casi al mismo tiempo que echaba mano del trasero del objeto de su broma,

las luchas en las que alguien guardaba un objeto de otro soldado y desafiaba al compañero con un desafiante: “Lo quiere? Venga por el”, reto que seguía con un forcejeo cuerpo a cuerpo que generalmente terminaba con una erección, tanto en los luchadores como los espectadores de tal evento.

 

"LAS REGLAS DEL CONTACTO ENTRE SOLDADOS"

"No solo no se hablaría abiertamente de las relaciones entre soldados, pero también se omitiría cualquier referencia a estos actos con personas de rangos diferentes, pues tales actividades se

llevarían como un secreto grupal frente a aquellos otros que quizás

no entenderían o aprobarían muchas de las cosas que los soldados

debíamos hacer para conservar cierta paz mental frente a la presión

externa que vivíamos..."

"...Aun si alguien del grupo no participaba de estas actividades, se le erigirían los mismos parámetros de discreción con los compañeros so pena de enfrentar la furia de los soldados, pues si los castigos de los oficiales eran crueles, aquellos provenientes de tus mismos compañeros eran imposibles de sobrevivir..."

"...Si mantenías estas relaciones clandestinas en ese espacio no clasificado por las palabras, teniendo en mente que tus pares realizarían las mismas actividades sin preocupaciones de ningún tipo y si culpabas a la naturaleza o al sentido de competencia como la causa de estas actividades, nunca tendrías que enfrentar miedos con respecto a tu orientación sexual..."

 

Ya sólo tenéis que acercaros a una librería y comprarlo. Espero que os haya atraído y disfrutéis de su lectura.