Vacaciones truncadas

Oriol.

Como os dije en un post anterior (mis vacaciones), pensaba recorrerme en esta semana de descanso algunas playas nudistas de Cádiz y Huelva, pero las ganas de ponerme moreno y sobre todo mi poca cabeza, me han obligado a posponerlo, sólo he podido visitar Matalascañas y El Asperillo, ¿por qué?, simplemente porque soy gilipollas. Mirad estas fotos, seguro que se os escapa "que capullo es el tío",  tenéis toda la razón.

El primer baño desnudo en El Asperillo fue maravilloso, pero mejor aún estuvo la caminata hacia el mar y el paseo después por la orilla, completamente en bolas, consiguiendo mi principal objetivo, vencer el miedo a enseñar el cuerpo a los demás.

La ducha en mi casa fue un infierno, me dieron después has escalofríos, pensé que había pillado una insolación.

Crema hidratante por toda la parte trasera que es lo que más me quemé. Mi culo ardía jeje, pero no de lo que pensáis, me molestaba hasta sentarme.

Caí reventado en la cama, el sol me enseño que no se puede jugar con el.

Cada vez que vayáis a la playa acordaros de mi y no olvidéis el protector solar, sino lo pasareis bastante mal.